viernes, 27 de septiembre de 2013

Teengears [ Valor y Riesgos ]




Capitulo.- 14         —Valor y Riesgos—





La catástrofe que se vive alrededor del mundo está acabando con la humanidad. Ya no existe eso que una vez se llamó vida, para las personas fuera de Estados Unidos. Apenas son alimentados, y cada que algunas naves estadounidenses descargan cajas llenas de alimento por las calles. La gente que sobrevivió y ahora se encuentra esclavizada, se lanza con desesperación y ansiedad a romper esas cajas, empujándose y arañándose para poder alcanzar algo de comida.
No tienen conciencia, ni pensamiento propio. Están como programados a obedecer y vivir para servir a los Estados Unidos. Esta gente no puede hacer nada para defenderse. Permanecen involuntariamente bajo el dominio del HAARP y la nueva orden mundial que impuso E.U.
Siendo el único país en el mundo que conserva a su gente con una estabilidad mental normal, sin la alteración del Haarp. ¿Será que este demonio seguirá reinando en este infierno que el mismo ha creado?.

Dentro del país los medios de comunicación estaban amenazados al igual que todos los habitantes. Su deber es simplemente informar y hacer como si nada pasara, entreteniendo al publico. Muchos ciudadanos estaban atemorizados y eran cobardes, prefieren callar y continuar con sus vidas. Sin embargo desde la inmensa oscuridad se alzaba una chispa de luz, una pizca de esperanza que todo el país conocía. Se trata de un grupo de valientes personas que se oponen al Haarp y al nuevo dominio mundial manipulado y forzado. Para algunos pueden parecer tontos, puesto que sin armas ni nada a su favor, siendo una minoría, es imposible que consigan algún cambio en el gobierno. Pero, este grupo de personas quienes se nombraron así mismos : “ C.E.H ” Siendo siglas de“ Contra El Haarp ”. Aún tienen fe, aunque puede parecer demasiado tarde o demasiado inútil. No se darán por vencidos tan fácilmente.

María, es una mujer que casi pisa los 30 años de edad. Por sus venas corre sangre Mexicana, pero nació afortunada o desafortunadamente en E.U.
Usualmente viste sencilla con pantalones de mezclilla y abrigos color arena, botas cafés de agujetas y normalmente recoge su oscuro cabello con una coleta bajo su oreja. Su piel canela, sus ojos grandes y marrones, nariz respingada y labios carnosos. Una belleza inigualable y una fuerza de voluntad imparable.
A pesar de las amenazas de muerte, no tiene miedo y alienta a su grupo como una buen líder.

Vocifera frente a su equipo en una sala de juntas del ultimo piso en un edificio.

—...¡Por eso! ¡Necesito su apoyo! ¡Se que puedo contar con ustedes! —ve a esas treinta personas sentadas en las sillas poniéndole toda su atención— ¡Hacen falta más miembros y más empeño! —hace a un lado el mechón de su cara— ¡No podemos dejar las manifestaciones! ¡Es lo único que podemos hacer por ahora! —aprieta sus puños— Si... —baja el tono de voz— Si tan solo todo el país se opusiera sin miedo como nosotros —mira la punta redonda de sus botines cafés— Quizá... lograríamos algo.


Algunas personas podrían jurar que María estaba apunto de llorar. Al contrario, ella levanta su frente con una mirada determinada.

—¡Es todo por ahora! ¡Preparence para mañana! ¡Lo intentaremos de nuevo! ¡El Haarp debe caer!


Se empieza a escuchar el rumor de las voces de la gente en la sala que poco a poco iban desocupando sus sillas.
María camina hacia un ventanal largo y contempla detenidamente la gris cuidad y el movimiento en las vías y calles que alcanza a ver. « Aquí, todo parece tan normal. Pero ni siquiera me gustaría imaginar... ¿Cómo la esta pasando esa gente?...» Coloca su mano contra el muro de cristal que parecía ventana y aprieta sus labios sintiendo que alguien se acerca. Su novio.
Naturalmente pelirrojo y de apariencia y estilo Dark. Le gustaba el color negro y no quedaba duda.


—Amor... —pasa su brazo encima de sus hombros viendo con ella la cuidad— Sabes que estoy contigo. Y que te apoyo pero. Mírame —tomando sus hombros y la voltea hacia el—... ¿Estamos bien cierto?. A nosotros no nos ha pasado nada y a esta cuidad tampoco. Sabes que por mi, estaría mejor que renunciaras a todo esto. No tiene caso amor. Solo te estás poniendo en peligro... ya los haz escuchado —alza sus cejas— No me gustaría que te pasara algo. Fíjate el tiempo que llevas manifestando y...
—Basta Tim...


Desvía su mirada y Tim puede detectar que se ha enojado.


—No renunciare. —se aleja de él, yendo a la puerta. Y es seguida por Tim— ¡Piensa en los niños que murieron!  ¡Todos murieron!. Y los que nacerán en un futuro, serán esclavos a partir de los ocho años. Y el Haarp volverá a ser activado para poder controlarlos ¡Piensa en todo eso! —llega al umbral de la puerta y ahí se detiene sin mirar atrás.

Tim la alcanza y acaricia su hombro. Tronándole un beso en su mejilla.

—Entiendo pero... piensa en ti primero. En nuestro futuro. ¿Si?

.

.

A plena luz del día. Pero en lo más profundo y oscuro del océano, no se distingue la diferencia del día y la noche.
Steve les ha puesto un duro y agotador entrenamiento a Lea y Seungri. Entre los cinco científicos mantienen el secreto de la fuerza sobrehumana que poseen. Ellos tan inocentes creen que la facilidad con la que se mueven, esa agilidad, fuerza y rapidez es gracias a los sensores que les implanta Steve en tobillos, rodillas, codos y cuello. No era más que un pretexto. Break sabe que sus jóvenes engranajes no deben confiarse, ya que deben superar sus expectativas, de no ser así jamas podrán vencer a ese demonio estadounidense llamado: Haarp. Que cuenta con un ejercito de élite, siendo parte de esa gran asociación.

Desde la primer prueba que les puso Steve. Ha pasado una semana y las pruebas se volvían cada vez más difíciles. Lea siempre es quien se esfuerza más en superarlas. Seungri seguía siendo un bobo que nada toma en serio, como si fuera incapaz de darse cuenta de la situación que esta viviendo.

Greg, Steve, Jake, Edric y Break, avanzan muy rápido en el cambio del mecanismo y mejoramiento de los Alienbots. Faltaba muy poco para darlos por terminados. Han trabajado duro todo el tiempo, solo hacían breves pausas para atender sus necesidades, también dormían muy poco, pero parecían inhumanos. En sus rostros no se reflejaban los desvelos ni el cansancio. ¿Será por que son del futuro, y su organismo es diferente?. Al ser de una era avanzada.

.

.

Después de un arduo entrenamiento con el estricto y poco sociable Steve. Lea se dispone a tomar un descanso. Y buscando desesperadamente una distracción, visita el jardín subterráneo del edificio. El único sitio en donde podía ver un paisaje natural muy parecido al de la tierra. Y los reales rayos del sol que se proyectaban desde ese techo blanco, la bañaban proporcionándole energía y dándole color a su rostro. Sintiendo la tibieza en su blanca piel, se integra al jardín tan verde y colorido. Tocando a su paso las pequeñas flores que desprendían un dulce aroma y palpando los troncos de los arboles se dibuja una sonrisa en sus labios.
Finalmente puede estar sola y con tranquilidad. Entre la naturaleza, descubre un pequeño arroyo y algunas mariposas que volaban por ahí. Se ve tan real, que por un momento olvida que se encuentra bajo el océano y en un jardín.
Se sienta en la orilla del arroyo y sumerge sus pies desnudos en la cristalina agua, sintiendo como corre naturalmente, sensación que la relaja. Apoyando sus manos en el pasto bien cortado, cierra sus parpados y trata de vaciar su mente hasta del mas mínimo pensamiento.

—¡Lea!

Se oye el grito de Seungri y unos pasos apresurados cada vez más cerca. Con un respingo Lea abre sus ojos y voltea a verlo tras ella arrugando el ceño.


—¡Vete de aquí! ¡Quiero estar sola!

Seungri se arrodilla y observa sus pies en la corriente de agua.

—¡Oh! ¡Yo también quie...!
—¡Cállate y lárgate! ¡¿Que no escuchaste?! —espeta, mirando a otro lado indignada.
—Oye... yo solo. —hace su labio inferior hacia adelante como haciendo puchero— ¡No quiero estar solo! ¡Break y los demás están en lo suyo y estoy aburrido!
—¿Y a mi que me importa?... —mirando sus pies.

Por unos segundos solo se escucha el rumor del agua.

—Lea... ¿Qué pasa contigo? ¿Por qué estás tan molesta?
—¿Por qué lo estoy? ¡¿Todavía lo preguntas?!

Seungri se atreve a sentarse a su lado con sus piernas dobladas cómodamente.

—En cada prueba... —responde Lea sin verlo— ¡Haz sido un idiota como siempre! ¡Todo me lo dejas a mi! ¡Estoy harta! ¡No haces ni el mínimo intento!. ¡Solo gritas y huyes...!. Eres tan cobarde. Le pediré a Break, que te abandone en tu país. No sirves de nada...


Aunque sus palabras fueran bastante crueles. Seungri muestra una sonrisa, de algún modo le parece linda.

—Ah, es eso... —libera una risita— ¡Ah Lea!. Incluso enojada te vez muy bonita. —la mira con el rabillo de su ojo.
—¡¿Eh?! —abre mucho sus ojos mirándolo.
—¿Sabes que he notado?... Ya no te haz mordido las uñas ¡Increíble! —con una amplia sonrisa toma su mano y la observa con una sonrisita— Poco a poquito, irán restaurándose —frota su mano en el dorso de ella suavemente.

Lea no puede dejar de ver su rostro perpleja. Y la sensación de la mano de Seungri le resulta placentera y cálida, lo que hace que brote un rubor en sus pálidas mejillas. No entiende por que su corazón vibra como loco.

—¡Déjame! —retira su mano y vuelve su vista a sus pies sonrojada.


Era tan claro como el agua el color de sus mejillas puesto que era muy blanca. Verla le conmueve a Seungri y es tentador para él. Lo incita a hacer algo más, pero toma fuerza para contenerse, sabe que si se atreve a tocarla, lo lamentará después. Callado la mira recordando aquella vez que la vio darse una ducha, y relame sus labios.

Lea se siente tan incomoda por lo que Seungri le provocó, que saca sus pies del agua y se dispone a irse.


—¡Espera, espera, espera! —Seungri con sus manos la mantiene en su sitio y del bolsillo de su pantalón saca un pequeño tubo de plástico del cual extrae una toallita portátil.

Se inclina ante ella y con la toallita palpa uno de sus pies secándolo, en tanto Lea queda como inmovilizada y estupefacta. No sabe que hacer... si darle un golpe o gritar. No puede, sus labios no le responden, al igual que todo su cuerpo.

—Ahora el otro... —dijo y paso al otro sonriendo.

Ese sonido y sensación de su acelerado latir. Confunde a Lea. « ¿Qué es esto?... ». Sus pies están secos y Seungri deja la toallita a un lado levantando su mirada, puede ver como los ojos y labios de Lea están medio cerrados y en sus mejillas resalta un matiz rojizo, delatando la excitación que siente. Apoyando sus manos y rodillas en el césped, Seungri se acerca a ella llegando a rozar su nariz. Lea siente el flujo de su sangre como si la quemara por dentro y no puede responder ni moverse. « ¡Aléjate! ¡Aléjate idiota! » Solo grita en su mente, de nada servirá. Apretando sus ojos, al sentir la suave respiración de Seungri que choca en sus labios y penetra en su nariz derritiéndola en su interior. Seungri pega sus pestañas y posa sus labios delicadamente sobre los de Lea.

.

.

Antes de que cayera la noche en la cuidad de Nueva York. Algunos agentes del gobierno localizaron la vivienda de la líder del grupo:“ C.E.H ”. Ya están cansados de tolerar sus manifestaciones y ya le habían advertido muchas veces. Llevan a María junto con su novio Tim hasta la concentración del H.A.A.R.P en donde avientan a María en una habitación vacía y oscura, con solo un foco que colgaba del techo y apenas alumbraba. Separándola de Tim. A él lo llevan a otro lado.


—¡Tim! —corre hacia la puerta que le azotan en sus narices— ¡Tim! ¡Abran la puerta! —la golpeaba con sus palmas alterada— ¡Tim!


De repente una pared se ilumina, llamando la atención de María. Descubriendo que la pared era un cristal y permite ver hacia la habitación de a lado, que por lo visto acaban de encender las luces. María puede ver que en el otro cuarto hay un sofá negro en el centro y algunos muebles. En eso entra un hombre con traje blanco, apoyándose en un bastón de oro, acompañado de un par de soldados que traen a Tim casi a rastras, quien a pesar de oponer resistencia con toda su fuerza, esos soldados sin ningún esfuerzo lo sujetaban.

—¡Tim! —María se pega al vidrio— ¡Suéltenlo! ¡El no tiene nada que ver! —su voz tiembla.
—Señorita María, tome su distancia por favor. Y escúchenos.


Se escucha la voz del hombre de blanco desde las bocinas en las esquinas de la habitación. El hombre cuya identidad María conocía bien. Era Gerard Eastlund, heredero del H.A.A.R.P y principal enemigo. Gerard se sienta en el sofá y apoyándose en su bastón, la mira sonriendo.

—Le habíamos advertido de todo esto ¿No es cierto? Y sin embargo ¿Usted que hizo?.

María retrocede y exalta sus ojos mirando con desprecio al hombre que le habla.

—Ciertamente. No es nada conveniente para usted ¿No es así, señorita María? —continua— Desgraciadamente... esta vez, no los hemos traído aquí para advertirle otra vez. En este momento dígale adiós a su pareja.
—¡¿Qué?! ¡¿Que esta diciendo?! —María empieza a temblar y tiene ganas de romper el cristal y llevarse a Tim lejos. Pero eso sería imposible con esos soldados ahí.


Con una señal que Gerard hace con su mano. Uno de los soldados golpea a Tim en cierto punto arrebatandole la vida en segundos. María solo es capaz de ver a través del cristal como Tim se derrumba al suelo como en cámara lenta.

.

.

.

.

.








1 comentario:

  1. D: ¿mataron al novio de maria? D: noo que malos son los soldados u__u

    XDD aww me encantan seungri y lea son muy lindos y divertidos ♥ hacen bonita pareja ♥

    pinche steve resulto mas extricto que break XD
    maldito heredero del haarp ahora que esta planeando? ¬¬ puto XDD .i.
    espero que Maria y Break unan fuerzas para derrotar al gerard y destruir el haarp :D yo se que SI SE PUEDE ♥

    estuvo muuy bueno como siempre y esperare el que sigue

    esta muuy buenooo ♥

    *o*

    ResponderEliminar

¡Gracias por leer!. Puedes comentar no importa si no tienes Blog, comenta como Anónimo, o pon tu nombre y el link de cualquier pagina, ahí te da opciones el Blog. Recuerda tus comentarios son gratificantes e importantes para mi :)